Descripción
Los cactus requieren de unos cuidados especiales para mantenerse sanos y bonitos. Te explicamos algunos consejos básicos para el cuidado de las cactáceas.
– Riego: Los cactus son plantas que almacenan agua en sus tejidos y pueden resistir largos periodos de sequía. Por eso, es importante no regarlos en exceso, ya que podrían pudrirse las raíces. Lo ideal es regarlos cada dos o tres semanas en verano y cada cuatro o seis semanas en invierno, siempre dejando que el suelo se seque completamente entre riegos.
– Luz: Los cactus necesitan mucha luz para realizar la fotosíntesis y crecer. La mayoría de ellos prefieren el sol directo, pero algunos pueden tolerar la luz indirecta o la sombra parcial.
– Suelo: Los cactus requieren un suelo bien drenado que no retenga el agua y que les permita respirar. Se puede usar una mezcla especial para cactus y suculentas o preparar una con tierra, arena y grava. También es importante usar una maceta con agujeros de drenaje y colocar una capa de piedras en el fondo para facilitar el drenaje.
Siguiendo estos consejos básicos podrás disfrutar de tus cactus durante mucho tiempo y admirar sus formas y flores tan singulares.